Death Stranding, a dejado de ser un misterio después de lanzamiento del trailer, donde podemos observar los orígenes y describiendo una dirección clara, respondiendo las preguntas más importantes, destinado a enfatizar una cara del proyecto cinematográfico del gameplay, mostrándonos fragmentos llenos de acción, con una gran superproducción con enfasis de la críptica historia.Las grandes superproducciones de la industria, se les presume que tienen detrás el presupuesto y el buen hacer para ofrecer una mínima resistencia y máximo disfrute a una amplia gama de jugadores.
En producciones se nota que tienen recursos más limitados y sólo logran alcanzar las cotas más altas a pesar de esas limitaciones, siendo tan superlativos en algunos aspectos clave que consiguen hacer olvidar el resto de sus taras. Puede parecer que los AAA lo tienen fácil, bendecidos con recursos fuera del alcance de la inmensa mayoría de estudios del mundo, pero no hay que olvidar que a mayor la apuesta, mayor es el riesgo, y eso obliga muchas veces a jugar sobre seguro, a crear algo demostradamente popular y a no salirse demasiado del camino para no espantar potenciales clientes.
Hay que reconocerle una cosa tanto a Hideo Kojima como a los que le rodean y han confiado en él: han sido valientes a la hora de plantear una superproducción que no se parece a ningún otro juego en esta categoría (para bien o para mal).Crear una IP (como The Last of Us o Horizon: Zero Dawn) se considera arriesgado, pero suelen tener mecánicas y géneros reconocibles para compensar; transformar una IP conocida a otra cosa, como pasó con God of War, se considera también arriesgado por las expectativas de los fans, pero el reconocimiento de marca está asegurado.
Con Death Stranding, que no es un exclusivo interno como los mencionados pero sí está coproducido por Sony, no sólo se ha creado una nueva IP, sino que también se ha apostado por un planteamiento jugable que es difícil de encasillar no vamos a llegar a los extremos del director de llamarlo un nuevo género, pero ciertamente es algo singular. Un doble tirabuzón que está al alcance de muy pocos nombres propios en este sector.