Las empresas ya no deben ser consideradas únicamente como culpables de las emisiones de gases de efecto invernadero, sino más bien como socios indispensables para la acción climática, que pueden aumentar sus ganancias si se vuelven ecológicas.
“Hacemos un llamado a todas las compañías en todos los sectores y regiones con el fin de que establezcan sus objetivos basados en la ciencia a un nuevo nivel de ambición, uno que se alinee con el objetivo de 1.5 ° C”, aseguró Lise Kingo, quien encabeza el Pacto Mundial de la ONU, una red de 9 500 pequeñas y grandes empresas privadas que se han comprometido a invertir más en el desarrollo sostenible.
Según el Pacto Mundial, casi la mitad de la lista Fortune 500 de las principales corporaciones de Estados Unidos han establecido objetivos claros de energía o metas de reducción de gases de efecto invernadero. Además, en 2016, 190 de esas empresas obtuvieron un ahorro total de 3 700 millones de dólares gracias a sus medidas de reducción de emisiones.
Para facilitar al sector privado la adopción de opciones respetuosas con el medio ambiente y al mismo tiempo aumentar las ganancias, una ONG, la Fundación Solar Impulse, se ha esforzado por reunir 1 000 soluciones que ya están en funcionamiento, por evaluar su impacto ambiental positivo y su rentabilidad.
Con medidas que van desde hacer que los hogares sean neutrales en carbono, hasta el desarrollo de sistemas de refrigeración más limpios o la producción de acero inoxidable de manera más eficiente y económica, Bertrand Piccard, quien en 2016 fue la primera persona en lograr un vuelo alrededor del mundo utilizando como combustible solo la energía solar, espera que la iniciativa ayude a argumentar que la acción climática puede ocurrir ahora y no debería tener que esperar hasta el 2050.
Con información de Noticias ONU.
