Thomas Edison nació el 11 de febrero de 1847, fue el creador del bombillo y de miles de artefactos más que cooperaron para el desarrollo de Estados Unidos y el mundo entero. Registró 1093 patentes a su nombre en Estados Unidos.
A los 12 años vendía periódicos; a los 15 ya trabajaba como telegrafista y a los 16 realizaba su primer invento, un mecanismo para la transmisión de señales entre estaciones de telégrafo sin personal. A los 21 tramitó su primera patente, lo que volvería a hacer en más de mil ocasiones a lo largo de su vida.
1. El bombillo
Uno de los inventos más importantes para la humanidad fue cuando un 21 de octubre de 1879 Thomas dejó un filamento incandescente encendido durante 48 horas sin interrupciones, creando así el artefacto más conocido: el bombillo. Sin embargo, este artefacto había sido empleado primeramente por Humphry Davy y perfeccionado por Warren de la Rue.
Luego de tres meses, el 27 de enero de 1880, el inventor estadounidense inscribió la patente de su invento y comenzó la producción en masa.
2. Telégrafo cuádruplex
Sin embargo, el bombillo no fue su primer invento. En 1874 crea un sistema con el cual se podían recibir cuatro mensajes telegráficos simultáneamente por una misma línea, dos en un sentido y dos en otro, llamado: telégrafo cuádruplex.
3. Micrófono de carbón
4. El fonógrafo
Otro de sus importantes inventos fue el fonógrafo, el dispositivo que se usó para reproducir sonidos grabados desde la época de 1870. Este artefacto se usaba en los laboratorios de acústica para estudiar los sonidos, el habla y las frecuencias de los tonos musicales. Eldridge R. Johnson y Émile Berliner ayudaron a Thomas Edison con la elaboración del artefacto.
5. El kinetoscopio
Otra de sus creaciones fue el kinetoscopio, una innovación que “haría para los ojos lo que el fonógrafo hace para el oído”. Su intención era crear un sistema audiovisual completo. Decía que con este aparato “se podía ver y escuchar una ópera como si estuviéramos presentes”.
Muchos estudiosos e historiadores le dan todo el crédito a William Dickson, quien fue uno de sus hombres con mayor talento y el encargado del desarrollo del kinetoscopio, mientras que Thomas “participó supervisando el trabajo”.
