Las inundaciones en el Centro y el Este de China han dejado 141 muertos y desaparecidos y ahora amenazan a la metrópolis de Wuhan. Además, hay 28 mil viviendas dañadas y cerca de 38 millones de habitantes afectados.
La ciudad forma parte de la lista de los lugares que están alertas ante el aumento del caudal del río Yangtsé, el más largo de China.
El nivel de agua del Yangtsé, que recorre más de seis mil kilómetros, está alcanzando cotas de riesgo: llegó a su tercera marca más elevada de la historia en Wuhan.
Las tormentas de los últimos meses, las segundas más abundantes desde 1961, han anegado pueblos completos, obligando a los trabajadores de emergencias a reforzar diques y excavar canales para evitar desbordamientos.
Los aumentos de caudal en 433 ríos han superado los niveles de alerta y 33 registraron niveles récord, según el viceministro de Gestión de Emergencias, Zheng Guoguang. Además del Yangtsé, otros lagos y sistemas fluviales han registrado crecidas, incluidos el Río Amarillo en el Norte, el Zhujiang en el Sur y el Taihu, el lago de agua dulce más grande de China, al Oeste de Shanghái.
Las inundaciones de la semana pasada obligaron a reprogramar parte del examen nacional de acceso a la universidad, que dura cuatro días y que ya había sido aplazado un mes por el brote de coronavirus.
Varios destinos turísticos importantes en el Sur de China han sufrido daños por inundaciones, agravando la crisis económica causada por el descenso de visitantes debido a la pandemia.
Con información de INFORMADOR.MX.