Durante más de mil años se ha reconocido a Santa Cecilia como Patrona de los Músicos por parte de la iglesia cristiana, en la Edad Media se representaba cantando y tocando el órgano, existen rumores sobre por qué es relacionada al mundo de la música, la cual se debe a ser usada por muchos pintores para ser pintada en sus obras de arte con vinculación a este campo.
Los principios de la celebración del Día del Músico fue en Normandía, el 22 de noviembre de 1570, donde se llevaba a cabo un torneo de compositores de la época, en la ciudad de Evreux. La Unesco o mejor conocida como la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura estableció el 22 de noviembre como el Día del Músico en honor a Santa Cecilia y fue nombrada Patrona de los Músicos por el Papa Gregorio XIII en 1584.
Frases como “Con la música por dentro” o “Eres bien música”, ambas tienen referencia a una de las expresiones artísticas más antiguas y bellas. De acuerdo con cada sociedad, la música está estrechamente relacionada con su cultura.
La música ha acompañado a la humanidad durante mucho tiempo. Tiene sus raíces en la prehistoria hace más de 30,000 años cuando el hombre, intentando imitar los diferentes sonidos de la naturaleza, tocaba flautas de hueso, instrumentos de percusión y birimbaos. En esa época, la música tenía que ver con rituales de apareamiento y trabajo colectivo.
Santa Cecilia ha sido plasmada por diversos artistas desde el siglo XV. En la iconografía se le reconoce por estar acompañada de un instrumento musical, casi siempre por una lira o un arpa. Y es que a Santa Cecilia se le asocia con la música porque se dice que cuando su padre la casó en contra de su voluntad, ella le cantaba a Dios.
México ha sido semillero de grandes músicos. La riqueza de géneros y ritmos como los sones, el huapango, las pirekuas, la música de banda y el mariachi, entre otros, lo han posicionado a nivel mundial. Genios musicales como Consuelo Velázquez, Mario Lavista, Gabriela Ortiz, Arturo Márquez, Carlos Chávez, Silvestre Revueltas, José Pablo Moncayo, Manuel M. Ponce y José Alfredo Jiménez, entre muchos otros, han llevado su arte más allá de las fronteras.