La marca de ‘Star Wars’ a manos de Disney es imparables en la pantalla grande y demuestra ser una empresa ambiciosa, al ofrecer una nueva película de la saga cada Navidad, pero tras los problemas en la venta de boletos de sus últimas dos películas de Rogue One: A Star Wars Story, 2016 y ‘Han Solo’ 2018, han decidido replantearse todo.
El tortazo en taquilla del origen del contrabandista espacial hizo replantearse a Disney la sucesiva succión a la primera trilogía que estaban llevando a cabo y, mientras se han ido cerrando algunos proyectos, los contenidos relacionados a la saga de Lucasfilm no planean parar en mucho tiempo, porque es más que posible que los fans no vayan a plantearse dejar de verlas. En este caso, la exploración de los aspectos relacionados con la saga está íntimamente relacionada con ‘Han Solo’, puesto que toca los mismos cables de pulp viejuno.
En la actualidad ‘The Mandalorian’ es una de las primera serie para televisión con personajes que en un entorno de acción real por parte de la gran industria de Star Wars, preparada para la plataforma Disney + y creada por Jon Favreau, aunque por el momento han mantenido todo en secreto, los fanáticos por fin tienen la oportunidad de dar un vistazo al tan esperado estreno de su piloto, donde en 38 minutos se las arregla para establecer la trama, presentar algunos personajes clave e incluir los guiños a Star Wars que los fans han venido a buscar.
Diseñado para que los espectadores absorban información y conozcan a Boba fett, el Mandaloriano, interpretado por un Pedro Pascal al que no vamos a ver la cara en el episodio, un cazarrecompensas con la tarea conseguir una pieza misteriosa para alguien que solo conocemos como el cliente, interpretado por el director Werner Herzog. En el camino se encuentra con un Ugnaught llamado Kuiil (Nick Nolte) y un droide de recompensa llamado IG-11 (Taika Waititi) y poco más para ir describiendo los tonos que va a tener la serie, que se mueve a un ritmo asombroso y una claridad narrativa envidiable.
Los espacios abiertos, la descripción estética de los planetas, no tiene nada que envidiar a las películas de la saga, aunque su condición televisiva se deja notar más en los escenarios cerrados, en donde la puesta en escena es mucho más vulgar, típica de segunda unidad. Su fotografía, diseño de producción y reparto son estupendos y su actitud sobria la emparentan con cine de aventuras de otras épocas, aunque hay una sombra de producto para todos los públicos que no acaba de casar con el tono de misiones de cazarrecompensas duros y mundos de crimen.