Jaime Mario Torres Bodet nació en la Ciudad de México, 17 de abril de 1902 y falleció 13 de mayo de 1974 quien como literato uso los seudónimos de Celuloide, Sube y Baja y Marcial Rojas (seudónimo compartido con Bernardo Ortiz de Montellano).
Fue un diplomático, funcionario público, escritor, ensayista y poeta mexicano; además, fungió como director general de la UNESCO de 1948 a 1952. Su trabajo en la alfabetización ha sido reconocido, además de haber implementado la política de relaciones exteriores durante los inicios de la Guerra Fría. Perteneció al grupo de Los Contemporáneos. Tras 16 años de lucha contra el cáncer, se suicidó en 1974.
Con 16 años editó su primer libro de poemas, al que tituló Fervor. Fue jefe del Departamento de Bibliotecas del Ministerio de Instrucción Pública (de 1922 a 1924).
Perteneciente a los jóvenes escritores de la generación vanguardista surgida en los primeros años del México posrevolucionario. Su obra comprende poesía, ensayos, novelas, relatos y traducciones.
Fue secretario personal del pensador y político mexicano José Vasconcelos y, de 1928 a 1931, codirigió Contemporáneos, revista cultural de vanguardia órgano de expresión del grupo literario mexicano del mismo nombre.
En 1929, accedió a la carrera diplomática sirviendo en las embajadas de París, Madrid, Buenos Aires y Bruselas.
Desde 1943 hasta 1946, se desempeñó como secretario de Educación Pública, bajo la presidencia de Manuel Ávila Camacho lanzando una campaña de lucha contra el analfabetismo de una amplitud sin precedentes. También fue precursor de los museos Nacional de Antropología y de Arte Moderno. Posteriormente fue secretario de Relaciones Exteriores entre 1946 y 1948 en el gobierno de Miguel Alemán Valdés. Elegido director general de la Organización para la Educación, la Ciencia y la Cultura de las Naciones Unidas (UNESCO) en 1948, donde permaneció hasta 1952.
Se le nombró embajador mexicano de Francia, y posteriormente, con el presidente Adolfo López Mateos, volvió a ocupar la secretaría de Educación Pública, de 1958 hasta 1964.
En su labor literaria, publicó Sonetos (1949) y estudios sobre la obra de escritores como Fiódor Dostoyevski, Stendhal y Benito Pérez Galdós que reunió con el título de Tres inventores de realidad (1955).
Perteneciente a la Academia Mexicana de la Lengua y al Colegio Nacional. Fue distinguido con el Premio Mazatlán de Literatura (1968) y el Premio Nacional de Letras (1966).
Sus memorias se editaron en seis volúmenes en 1955, 1970, 1971, 1972 y 1974.