ATLANTA (AP) — El volante argentino Gonzalo “Pity” Martínez finalmente concretó su traspaso al Atlanta United, el equipo que conquistó el título de la MLS en apenas su segunda temporada en la liga estadounidense.
Atlanta United anunció el fichaje el jueves. La operación era esperada desde hace varias semanas. Martínez anunció su salida de River Plate apenas después que el club argentino se coronó campeón de la Copa Libertadores el mes pasado. El jugador de 25 años fue visto esta semana al llegar al aeropuerto de Atlanta, donde firmó autógrafos.
No se difundieron los detalles sobre el traspaso, pero se ha ventilado que el United pagó 14 millones de dólares por la ficha del centrocampista ofensivo — una de las más altas en la historia de la MLS. Es otra muestra de los recursos financieros de un conjunto que ha batido numerosos récords de concurrencia en los últimos dos años.
Atlanta United promedió más de 53.000 aficionados en sus partidos de liga la temporada pasada, una de las cifras más altas del mundo y más del doble que cualquier equipo de la MLS con excepción de Seattle (40.641) y Toronto (26.628).
El “Pity”, consagrado con el premio de “Rey de América” al mejor futbolista de Sudamérica de 2018, según la encuesta del diario uruguayo El País, será el cuarto jugador franquicia de Atlanta United. La etiqueta de jugador franquicia permite a los clubes de la MLS fichar a estrellas que quedan excluidos del tope salarial.
El equipo ha tanteado el posible traspaso del centrocampista paraguayo Miguel Almirón, segundo en la votación del Jugador Más Valioso la pasada temporada, a la Liga Premier inglesa durante el mercado de invierno pero no ha recibido una oferta formal. El presidente del equipo, Darren Eales, dijo que el United espera un traspaso de alrededor de 30 millones de dólares.
En caso de que Almirón permanezca en Atlanta, al menos hasta la próxima ventana de traspasos a mediados de año, es posible que el equipo intente ceda en préstamo al volante Ezequiel Barco, un argentino de 19 años que tuvo una decepcionante primera campaña con el conjunto.
El otro jugador franquicia del United es el actual MVP de la liga, el artillero venezolano Josef Martínez, quien impuso un récord de la liga con 31 goles y recientemente acordó una extensión de contrato que lo mantendrá en Atlanta hasta 2023.
La adquisición del “Pity” demuestra que el United sigue siendo un destino atractivo para el talento sudamericano, incluso después de la partida del técnico Gerardo “Tata” Martino, quien asumió las riendas de la selección de México y fue reemplazado por el ex astro holandés Frank de Boer.
“Lo que me motivó es que es una liga que está creciendo a pasos agigantados”, dijo Martínez. “Puede ser un trampolín para ir a Europa. Puedo aportarle al club en el mano a mano y en el desequilibrio individual, que es lo más fuerte que tengo”.
Podría actuar en el primer compromiso del United en la Liga de Campeones de CONCACAF el próximo mes. La liga inicia el 3 de marzo.
Martínez debe encajar bien con el estilo ofensivo de Atlanta que encabeza Martínez, quien además sumó cuatro tantos en los playoffs. El United derrotó 2-0 a Portland en la final de la MLS ante más de 73.000 espectadores en el Mercedes-Benz Stadium.
“Gonzalo es un jugador de ataque que puede jugar por los extremos o el centro”, dijo el director deportivo del equipo Carlos Bocanegra. “Sus habilidades complementan nuestro estilo de juego y esperamos que encaje bien en la MLS”.
Martínez debutó como profesional en 2011 y llegó a River Plate en enero de 2015, donde anotó 33 goles en 167 partidos en todas las competencias. El conjunto ganó dos veces la Copa Libertadores con el “Pity” en el plantel.
Su último partido con River fue durante el Mundial de Clubes en los Emiratos Árabes Unidos. El equipo cayó sorpresivamente en las semifinales al perder en una tanda de penales ante los anfitriones Al-Ain, pero Martínez anotó dos tantos en la victoria de 4-0 sobre el Kashima Antlers de Japón en el duelo por el tercer lugar el 22 de diciembre.
También metió el tercer tanto en la agonía del alargue para sellar la victoria 3-1 ante su clásico rival Boca Juniors, en el partido de vuelta de la final de la Libertadores que se jugó en Madrid.
