RÍO DE JANEIRO (AP) — El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, atacó y amenazó públicamente el sábado con encarcelar al periodista estadounidense Glenn Greenwald, quien en las últimas semanas ha publicado informes que comprometen al ministro de Justicia Sergio Moro, considerado una pieza clave del gobierno.
“Tal vez vaya preso aquí en Brasil,” desafió Bolsonaro luego de una ceremonia militar en Río de Janeiro, aludiendo a Greenwald, según reportaron medios locales.
El comentario de Bolsonaro llega apenas un día después de que el gobierno emitiera nuevas normas que agilizan la deportación de extranjeros considerados “peligrosos” o que han violado la Constitución.
Las reglas publicadas el viernes por el ministro Moro definen a una persona como peligrosa si presenta cualquier vínculo con el terrorismo, la delincuencia organizada o grupos armados. También permite a las autoridades utilizar información de agencias de inteligencia para determinar si un extranjero es peligroso.
Greenwald respondió desafiante a Bolsonaro en su cuenta de Twitter.
“Al contrario de lo que dice el presidente, él no es (todavía) un dictador. No tiene el poder para ordenar detener personas. Para detener a alguien necesita presentar pruebas a un tribunal que muestren que se cometió un delito. Esa evidencia no existe”, tuiteó.
Greenwald, ganador de un premio Pulitzer, dijo el viernes que las reglas fueron modificadas para poder arrestarlo “por reportar”.
El periodista estadounidense es editor del sitio web The Intercept Brasil, que ha publicado varios reportajes basados en conversaciones telefónicas filtradas tras un hackeo a los teléfonos celulares de Moro y de un grupo de fiscales. Las revelaciones comprometen al exjuez por una posible extralimitación judicial cuando se desempeñó como magistrado anticorrupción a cargo del caso Lava Jato.
Tras lanzar la amenaza de que podría ir a la cárcel, Bolsonaro sugirió que Greenwald contrajo matrimonio con su marido David Miranda, un diputado federal de izquierda, y juntos adoptaron hijos en Brasil como una táctica para evitar la deportación.
“Él no aplicaría a la nuevas reglas porque es casado con otro hombre y tienen niños adoptados en Brasil. Sinvergüenza, sinvergüenza… para evitar un problema se casa con otro sinvergüenza y adopta un niño en Brasil. Puede quedarse tranquilo (Greenwald), no va a irse”, dijo el presidente.
En un ambiente político polarizado y hostil, Greenwald y su marido han sido blanco de ataques, amenazas de muerte y comentarios homofóbicos cuando comenzaron las publicaciones periodísticas.
Según los mensajes publicados por The Intercept, Moro habría asesorado indebidamente a los fiscales del Lava Jato en un proceso por corrupción contra el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.
La condena de Moro en ese juicio, y su posterior ratificación en instancias ulteriores, llevaron al expresidente a la cárcel y le impidieron ser candidato a presidente en 2018, elección en la que Bolsonaro resultó electo.
Bolsonaro ha criticado a menudo a la prensa, acusando a los grandes medios de comunicación de generar mentiras para dañar su imagen.
Además, en ocasiones ha abandonado conferencias de prensa, molesto con las preguntas. Este viernes, cuando un periodista le preguntó por qué sus familiares habían usado un helicóptero de la fuerza aérea para un traslado particular, Bolsonaro dijo que la pregunta era “idiota” y dio por concluida la rueda de prensa.
La Asociación Brasileña de Periodismo Investigativo (ABRAJI) condenó las declaraciones del presidente y pidió el fin de la “persecución”.
“Al amenazar de prisión a un periodista que publica informaciones que le desagradan, el presidente promueve e instiga graves agresiones a la libertad de expresión. Sin periodismo libre, las otras libertades también morirán”, expresó la ABRAJI.