Por Isla Binnie y Jose Elías Rodríguez
MADRID, 20 feb (Reuters) – Las acciones de Telefónica protagonizaban las caídas del Ibex al desplomarse un 5% el jueves tras anunciar una fuerte caída en sus beneficios anuales por el costoso programa de despidos y jubilaciones en España.
Como otros rivales europeos, el cuarto grupo de telecomunicaciones de Europa está esforzándose por mejorar su rentabilidad en un mercado cada vez más competitivo y el año pasado anunció una amplia remodelación de sus negocios.[nL8N28756O]
En el marco de sus planes para revitalizar su actividad, el grupo puso en marcha un programa de jubilaciones anticipadas para empleados de más de 53 años en España, que contribuyó a las provisiones de 2.200 millones de euros que provocaron un desplome del 66% en el beneficio neto reportado en 2019.
Pérdidas en la filial mexicana en el cuarto trimestre y un deterioro del fondo de comercio en Argentina fueron otros factores detrás de este resultado.
El bróker CM Capital Markets ve las cuentas claramente negativas para la acción porque el beneficio neto “se situó claramente por debajo de las estimaciones de consenso”.
A las 1203 hora local, las acciones de Telefónica se dejaban un 5,04% a 6,21 euros.
El año pasado, los ingresos de Telefónica alcanzaron los 48.422 millones de euros, un 3,2% más en términos orgánicos que en 2018 y por encima del objetivo de la compañía de un incremento de en torno al 2%.
Una recopilación de previsiones de analistas proporcionada por la operadora apuntaba de media a unas ventas de 47.801 millones el año pasado.
El beneficio operativo bruto (OIBDA) subyacente subió 1,9% orgánico, en línea con su propia guía, a 15.119 millones de euros. En términos reportados, el OIBDA bajó un 2,9% interanual por costes de reestructuración, un deterioro del fondo de comercio en Argentina, plusvalías y otros factores.
El presidente ejecutivo de Telefónica, José María Álvarez Pallete destacó que la compañía ha comenzando con una buena evolución operativa el 2020, año en el que se enfocarán en la ejecución de nueva estrategia.
“Respecto a nuestros objetivos fijados para 2020, esperamos crecer de manera estable en las principales magnitudes, un dividendo estable y atractivo. A largo plazo, tenemos un objetivo de crecimiento sostenible y responsable”, dijo en el comunicado del grupo de telecomunicaciones.
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MENOR PREOCUPACIÓN POR LA DEUDA
Ante los analistas, el directivo quiso lanzar un mensaje de tranquilidad sobre la deuda, uno de los principales caballos de batalla de Telefónica en los últimos años, asegurando que veía cerca el momento en el que esta dejase de ser una preocupación gracias a las potenciales ventas de activos.
Llegado ese punto, la empresa reconsideraría la remuneración al accionista, abriendo la puerta a posibles recompras de acciones.
“Una vez nos sintamos cómodos con la reducción de deuda y el perfil de apalancamiento”, puntualizó Álvarez-Pallete.
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(Información adicional de Laura Hijón, Editado por Emma Pinedo y Jose Elías Rodríguez)
