Porque Guanajuato es la tierra de oportunidades, a un año nueve meses de que concluya la administración del gobernador Miguel Márquez Márquez, se rebasó la meta de atracción de inversiones casi el doble al generarse 10 000 millones de dólares a través de 206 proyectos en lugar de los 5 000 millones que se tenían programados inicialmente.
Así lo reveló para CAMBIO Franco Herrera Sánchez, subsecretario de Atracción de Inversiones de la Secretaría de Desarrollo Económico Sustentable del estado de Guanajuato, quien agregó que de igual manera en materia de generación de empleos al inicio de la presente administración estatal se contemplaron crear 45 000 nuevos trabajos directos; sin embargo, hasta el momento 70 000 personas se han integrado de manera formal al mercado laboral.
“Guanajuato va a seguir con el mismo ritmo de crecimiento económico relevante, que hasta algunos países asiáticos envidiarían”, puntualizó el funcionario al sostener que, ejemplo de ello, es el boom que ha generado el sector automotriz en la entidad, como la llegada de Toyota al municipio de Apaseo el Grande, anuncio que hizo el 15 de abril de 2015 el presidente de la República Enrique Peña Nieto.
Detalló que esa ensambladora automotriz tiene actualmente el 100 % de la tierra donde construirá su planta, aunque todavía se expropian las parcelas que faltan para completar el polígono de 607 hectáreas totales, pues en 2018 iniciarán las primeras pruebas de ensamble de vehículos automotores, para que el primero de julio de 2019 salga a la venta en Guanajuato el primer vehículo de esa marca japonesa con una producción de 200 000 vehículos al año, especializándose en los automóviles modelo Corolla.
Del total de la superficie del ejido Caleras de Ameche, donde se planea instalar Toyota, poco más de 262 hectáreas fueron compradas por el Gobierno de Guanajuato a la empresa de Grupo GP, situación que ha provocado algunos rumores entre los ejidatarios y pequeños propietarios, quienes especulan que “los presionaron para vender a un precio menor”.
No obstante, el gobernador ha reiterado que no existen presuntas irregularidades en la adquisición de terrenos destinados a Toyota al comentar que “nosotros hemos sido muy claros y específicos: compramos a 148 pesos el metro cuadrado a todos y eso es parejo; los contratos entre privados es un asunto que no obedece a nosotros”, enfatizó
La demanda de los ejidatarios de la zona que aún no venden sus parcelas es que se les pague a 250 pesos el metro cuadrado como presuntamente fue comprada por la empresa Jaos & SGB (empresa constructora no pública más grande del país); no obstante, Márquez Márquez ha dicho que “a todos se les pagará igual, propietarios privados y expropiaciones”.
Por ello, ha insistido que el Gobierno del estado compró a un precio razonable y justo tanto a privados como ejidatarios, con apego a la norma, pero sobre todo con la frente en alto, pues “no tengo nada que esconder”, aclaró.
La excepción
Cabe resaltar que una de las políticas del gobernador guanajuatense fue la de no adquirir en lo absoluto reserva territorial durante su administración; sin embargo, de manera excepcional, por tratarse de un proyecto de esta magnitud que implica la inversión de alrededor de 1 000 millones de dólares y la generación de 2 000 empleos directos, se determinó que fuera el propio Gobierno estatal quien gestionara la compra de tierras.
Esta determinación fue tomada por el Ejecutivo del estado en atención a la solicitud formal planteada por la empresa Toyota, como una fundamental condicionante para que pudiera concertarse su instalación en el estado.
Franco Herrera Sánchez, para despejar cualquier duda sobre la adquisición de los terrenos, destacó que en las adquisiciones llevadas a cabo por el Gobierno del estado, se pagaron 148 pesos por metro cuadrado (algunas variables por centavos).
Precisó que los pagos aludidos por los dos decretos emitidos por el Ejecutivo federal se encuentran a cargo del Gobierno del estado, en consecuencia, agregó, “la totalidad de los pagos fueron cubiertos exclusivamente con recursos estatales”.
“El monto de 148 pesos por metro cuadrado resulta de avalúos realizados por el Gobierno del estado atendiendo diversas disposiciones jurídicas a las que se encuentra sujeto este tipo adquisiciones, que en la especie fue dada al tenor de lo establecido en el artículo 21.2 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos de la que el Estado mexicano es parte y de acuerdo con lo establecido por los artículos 1.° y 133 de la Constitución Política; permitiendo el derecho a la indemnización justa”.
Claridad
Es así que el gobernador Miguel Márquez descartó corrupción en la compra de los terrenos que la administración estatal adquirió y donó a la empresa automotriz Toyota.
Para que no queden dudas, el gobernador incluso aceptó una auditoria para que practique una revisión al proceso de adquisición y expropiación de los terrenos en Apaseo el Grande, situación a la que no se encontraba obligado, lo que habla de la transparencia y claridad en los procesos de ejecución del proyecto, apuntó Herrera Sánchez.
Afirmó que el pago de los inmuebles se ha dado con equidad, en términos de valoraciones técnicas justificadas; se ha encontrado además en su mayoría aceptación por parte de la comunidad y se ha visto con buenos ojos el aterrizaje de un proyecto económico de esta envergadura.