POR ELIZABETH PALACIOS
Estaba en la puerta cuando regresé corriendo por él, lo había olvidado. ¿Quién puede hoy salir de casa sin su smartphone? Desde allí había pedido el coche para llegar rápido a la cita con el chico con el que hice match y que por fin conoceré. Le he mandado mi ubicación, mientras arrancamos y el chofer sigue las instrucciones de una voz femenina que siempre tiene el mismo acento, con el cual nos dice que llegaremos en 15 minutos.
¿Te suena familiar? Quizá porque esta es una escena típica que podría pasarle a cualquiera a diario. Las aplicaciones nos rodean y pensar en perderlas suena peor que volver al oscurantismo.
Lo cierto es que la tecnología ocupa un lugar importante en todo lo que hacemos, incluso, en nuestra carrera profesional. Pero ¿de qué manera una app como Tinder pudo influir en nuestra cultura laboral?
Estos son sólo algunos ejemplos de cómo una innovación puede dar pie a otra y a otra, hasta el infinito. Cada día se crean y son lanzadas al mercado miles de aplicaciones. ¿Tú conoces otras que sirvan para conseguir trabajo? ¡Compártelas con nosotros a través de nuestro twitter!, @_revistacambio con el hashtag #JobApps ¿Te animas?
1. Linkedln
El 13 de junio, el mundo de los negocios tecnológicos despertó con una noticia impactante: Microsoft había aceptado pagar 196 pesos por cada acción de la red social Linkedln, sí, esa que alguna vez muchos abrimos y que luego, cuando nos enamoramos de Facebook, olvidamos actualizar. En total, la operación se cerró por la nada despreciable cantidad de 26 200 millones de dólares. ¿Bill Gates se había vuelto loco? Pues no, el visionario multimillonario había decidido apostar por una red que tenía lo que ninguna otra en el mundo: los datos y perfiles de los profesionales del mundo entero.
Al principio nadie sabía muy bien para qué se usarían las redes sociales. Hace casi una década que todos comenzamos a abrir cuentas en una y en otra, y al principio las manejánbamos igual todas. Linkedln no parecía ser tan divertida, contenía demasiada seriedad. No se llenó de memes ni de videos de gatos.
Hoy en día, Linkedln es una de las plataformas más utilizadas a fin de encontrar talento y se ha vuelto una invaluable herramienta de networking, donde los reclutadores salen de pesca, y hasta en un escaparate para la venta de servicios, consultorías y marketing digital. Tal ha sido la influencia de esta red social en el mundo laboral que muchas otras plataformas de reclutamiento de talento ya permiten que uno olvide los aburridos currículums y simplemente se conecte mediante la cuenta que tiene en el juguete nuevo de Bill Gates.
2. Apple
Steve Jobs fue un revolucionario que transformó muchas industrias, sin embargo, a pesar de lo que pensemos, su principal innovación, cuando de recursos humanos se trata, no está en la creación del iPhone… bueno sí, pero particularmente es una parte de este dispositivo lo que provocó un gran cambio. Apple no es el creador de la inteligencia artificial, no obstante, sí lo es de Siri, el personaje femenino que hizo que todas las personas no familiarizadas con la tecnología tuvieran una asistente en su iPhone, así los usuarios de apple tuvieron acceso cotidiano a la inteligencia artificial antes que nadie. En México, una startup descubrió cómo convertir un bot de inteligencia artificial en un reclutador de talento.
Vera Marakov estudió en Harvard, pero hoy vive en México donde, luego de haber trabajado en Hellofood, descubrió que algunas industrias, sobre todo de servicios, enfrentan una constante rotación de personal, y que las más pequeñas no cuentan con un área de recursos humanos. Así nació Apli, una startup en la cual la inteligencia artificial permite, a través de cuestionarios y algoritmos, que un bot converse con los candidatos y los evalué a través de algo tan común para todos como es el chat Facebook Messenger.
3. Tinder
¿Qué nos gusta de esta app? Al principio su éxito se basaba en que nos mostraba chicos o chicas (según sea el caso) que estaban cerca de nosotros. Después eso ya no era tan divertido porque o nos salían siempre los mismos o resultaba que los conocíamos, y eso de ver a tu vecino en pose sexy quizá no era lo mejor. No obstante, Tinder tiene otro encanto, y es que sólo puedes ser contactado por quienes también ha manifestado interés en ti, o sea que vas a la segura. Y justo esto fue lo que el mundo laboral decidió retomar. Los días en los que las bandejas de entrada de los reclutadores se saturaban de gente que no cumplía el perfil de un puesto se acabaron. Hoy hay aplicaciones que permiten que las partes interesadas sólo puedan establecer contactos cuando hicieron un match, como en Tinder.
Un par de hermanas mexicanas, María y Alejandra Albarrán, crearon WERK, una app de empleo temporal donde ambas partes, empleadores y empleados, deciden si quieren conectarse o no, con el propósito establecer una relación laboral. No es la única en el mundo, mas funciona muy bien, sobre todo cuando se busca un empleo temporal.
4. Uber
Hasta los teóricos han hablado de que vivimos una “uberización” de la economía. Y claro es que casi para cualquier cosa podríamos crear un “uber”. No, no todo tiene que ver con los autos, sin embargo, en términos muy coloquiales, podríamos decir que el modelo innovador de este unicornio lo resume muy bien un dicho popular: “Se juntaron el hambre y las ganas de comer”.
Este modelo de negocio se llama marketplace, y se trata de reunir a un prestador de determinado servicio o proveedor de un producto, con la persona o el mercado que desea consumirlo. Un intermediario crea una plataforma tecnológica donde les facilita conocerse, contactarse y la operación de compra-venta y pago, a cambio de una módica comisión y ¡bum! –como diría Javi Noble– o Voilà!, al estilo francés.
Así, este modelo lo usan aplicaciones dedicadas a recibir por un lado los CV de los candidatos y por otro, a recolectar vacantes de empresas reconocidas que necesiten personal. Ejemplos ya hay muchos, aunque el principio es el mismo, y funciona. Si no me crees, te pregunto, ¿hace cuánto que no compras una publicación de avisos clasificados con la finalidad de buscar trabajo?