El 20 de junio de 2009, elementos del Ejército mexicano detuvieron un camión de pasajeros en la comunidad de Huamuxtitlán, Guerrero, que iba rumbo a la Ciudad de México. Tras una revisión y la autorización para que arrancara, los elementos castrenses dispararon contra él vehículo. Uno de los pasajeros murió: Bonfilio Rubio Villegas, un joven de 29 años.
Siete años después, el caso será llevado ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) debido a que en México, abogados y familiares agotaron las instancias para conseguir justicia.
El caso en un primer momento se juzgó bajo el fuero castrense; sin embargo, la familia de la víctima interpuso un amparo ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación para que fuera juzgado bajo el fuero civil federal y se les dio la razón.
Tras esta decisión, el caso recayó en el Juzgado Séptimo de Distrito y determinó que no se podía inculpar al único militar detenido por las declaraciones de los testigos y fue exonerado.
Ahora, el caso fue presentado ante la Comisión Interamericana con el apoyo del Centro de Derechos de la Montaña Tlachinollan, el Centro de Derechos Humanos José María Morelos y Pavón así como el Robert F. Kennedy Human Rights; se espera que, tras el análisis, las autoridades mexicanas respondan el reclamo de justicia.
