Por Alejandra del Castillo
Gabriela piensa que pertenece a una generación de mujeres privilegiada por gozar de las luchas que se ganaron en el pasado, de no ser así, desconoce si ella misma podría tener su propio negocio hoy en día, si sería una empleada o estaría en casa. Sabe que todavía no se resuelve todo y que muchas mujeres en el mundo no conciben el papel de la mujer si no es en su forma tradicional, así que se plantea cuestionar el rol de las mujeres en la sociedad y siempre reflexionar que no todas tienen acceso a las mismas oportunidades.
Para pensar en una “mamá del futuro” es necesario una máquina del tiempo. Los engranes de este mecanismo se conforman por todas las luchas que han asumido las mujeres a lo largo de la historia, tienen la fuerza del feminismo, producen un poder de transformación constante y se mueven a partir de las decisiones que toma cada mujer todos los días. Pero no se puede negar que, si bien debe ser una elección libre, lo cierto es que la maternidad todavía es un aspecto fundamental de las mujeres para la humanidad.
Imaginar este futuro es posible gracias a Gabriela Arriaga, fundadora de Leonardo 1452, una compañía mexicana especializada en Near future thinking, es decir, hacer estudios predictivos sobre tendencias de hábitos, consumo y estilo de vida. Esta empresa elaboró en 2014 un estudio sobre el futuro cercano de las madres al año 2050.
Para generar la proyección de “la madre” al 2050, Leonardo 1452 construyó un gran diálogo entre niñas, mamás emprendedoras, mamás de la vieja guardia, papás que ejercen nuevas formas de paternidad, trabajo de campo, medios de comunicación y sus productos, fenómenos de innovación, redes sociales, nuevas tendencias de consumo y una red de expertos para imaginar futuro.
“La mamá del futuro” que resulta de esta proyección es una mujer que puede tomar cualquier clase de decisiones, la principal, por supuesto, la maternidad misma. Desde pequeña aprenderá a tomar sus propias elecciones, estudiará lo que quiera y los roles de género no serán más un límite para crecer en una sociedad mucho más incluyente.
Si esta mujer decide que quiere ser madre, se enfrentará a menos juicios, contará con más información y respeto sobre la elección entre un parto natural o una cesárea, por ejemplo.
“En el futuro se romperá esta tensión y la elección será mucho más libre”, explica Gabriela mientras menciona los mitos que hay alrededor del tema y las luchas sobre el mismo.
Sucederá lo mismo con el tema de la lactancia, las mamás podrán decidir lactar o elegir por la fórmula de una manera más libre, respetuosa y siempre informada. Una mamá puede decidir no lactar porque así lo quiere o comprender que por su situación específica las fórmulas infantiles son de mejor calidad a la leche materna. Esta decisión será contextualizada según cada madre, su historia y su complejidad.
Trabaja y decide
En el futuro, las mujeres podrán trabajar desde casa y lo harán por objetivos. Se dispersará la duda de si una mamá puede o no ejercer su profesión desde el hogar, dejarán de ser cuestionadas y destacará su capacidad y alto compromiso.
Profesionalmente, las mujeres estarán incluidas en grupos de trabajo que tradicionalmente eran de hombres, y esto no sólo por cumplir cuotas de género, sino porque la perspectiva femenina es incluyente y es fundamental para hacer mejor el trabajo.
Las mujeres que antes distribuían una habitación para tres de sus hijos, ahora diseñarán espacios de retail en una tienda; las que distribuían el gasto de un mes participarán en grandes decisiones financieras; las que sólo organizaban la sistematización de su hogar, estarán dedicadas a la urbanística de las ciudades.
Para la mamá del futuro será tan importante ser madre como realizarse profesionalmente y para ello tendrá más alternativas a fin de no partirse en dos. Atrás habrá quedado la supermujer que quiso ser la mujer de la generación X, o la mujer independiente y sin hijos que anhela ser la millennial de hoy.
Una de sus alternativas será emprender. “El emprendimiento es una vía donde la mujer puede crear un ecosistema de trabajo que se acomode a ella”, explica Gabriela y enumera que podrá tener su propio negocio, diseñar sus horarios y explotar su creatividad a fin de que ser mamá no sea una limitante para ser empresaria y viceversa.
Leonardo 1452 ha acuñado el término Mommy Manager y aunque al principio de su investigación parecía que surgiría una profesional del hogar, determinó que en el futuro serán lanzados todos los servicios on demand que fungirán como “facilitadores para que la mamá decida hacer lo que quiera hacer: estar en casa o trabajar fuera, pero con una vida mucho más organizada, gracias a la tecnología”.
Esto significa que de la misma forma en la que pide un auto para transportarse con un botón en su teléfono inteligente, podrá solicitar empleados de aseo doméstico, la compra del supermercado, atención médica, alimentación, niñeras, servicios de belleza, etc. Cabe resaltar que esto ya existe hoy en día, pero al ser servicios en etapa temprana, no todas las madres de familia los utilizan. Sin embargo, es una tendencia que crece y es eso lo que hace pensar a los especialistas del futuro en que los hábitos de consumo serán mucho más enfocados a la tecnología móvil.
En temas de educación sucederá lo mismo, las dinámicas se renovarán, ya no será necesario ir a juntas o firmar las boletas de la escuela. La lista de los útiles escolares, calendarios, circulares y calificaciones estarán disponibles por medio de un clic en una aplicación.
Belleza imperfecta
El arreglo de la mamá del futuro va a cambiar, ya no se regirá por estereotipos como el de aquella que se queda en casa y no dedica tiempo a su imagen, o el de la mamá que sale a trabajar en tacones y vestida para triunfar. Ahora tendrá una propuesta propia en la que será importante la actitud, la comodidad, la imagen –y sus accesorios. Gabriela lo explica de la siguiente manera: “La belleza comienza a ser imperfecta, empiezas a ser guapa por ser inteligente, porque tienes una posición de liderazgo, porque tienes un punto de vista, porque tienes un nivel educativo, porque has logrado ciertos peldaños en la sociedad, etc. todo eso pone el reflector en ti. Michelle Obama es un claro ejemplo de ello”.
Los resultados del Leonardo 1452 indican que en México hay una cultura del envejecimiento muy fuerte, sin embargo, poco a poco la mujer podrá vivir su edad con mucha más dignidad. Ahora existen expresiones por mostrar tal cual lo que somos y también el agotamiento de desafiar a la naturaleza por lucir siempre con los beneficios de una eterna juventud artificial. En el futuro se aceptarán las arrugas y las bolsitas en los ojos, los caminos sobre la piel serán una manifestación de experiencia, orgullo y dignidad. Las mamás del futuro, cuando sean abuelas, no van a dejar de producirse, mantendrán la propuesta sobre su imagen y lo harán aceptando lo que el tiempo les ha dejado.
Nota de la editora:
Los estudios de Near future thinking son sólo un referente que permite a las empresas y genios de la innovación enfocar sus objetivos. Sin embargo, para que estas proyecciones sean reales –en muchos casos y para muchos sectores, hoy son una utopía– no bastan los avances tecnológicos ni la creación de nuevos productos y servicios para el mercado. Se requiere el trabajo de toda la sociedad a fin de reducir la desigualdad de género, erradicar la violencia, impulsar sin prejuicios nuevas masculinidades y abrir espacios para que también haya nuevos padres, mucho más participativos, que compartan la responsabilidad de la crianza. Con el objetivo de que este escenario sea real en el futuro, debemos trabajar arduamente por construirlo en el presente.
