Cientos de personas desplazadas haitianas, africanas y mexicanas, están varadas en Tijuana y Mexicali, muchas de ellas en espera de una cita con el Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras estadounidense.
El 22 de septiembre, Estados Unidos interrumpió el permiso humanitario que había concedido a las personas haitianas tras el terremoto de 2010 y reanudó las expulsiones regulares, lo que intensificó la avalancha de haitianos hacia la frontera entre México y Estados Unidos.
Es por ello que Amnistía Internacional hizo un llamado urgente a las autoridades para que las personas migrantes y las posibles solicitantes de asilo tengan acceso a camas en albergues, comida, atención psicológica y seguridad personal.
También pidió que funcionarios de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados se desplieguen al terreno para garantizar una selección adecuada de las personas migrantes que puedan tener derecho a protección internacional tras una colaboración con las autoridades de Estados Unidos.
Staff CAMBIO
