Los niños que consumen bebidas azucaradas a temprana edad mantienen este patrón cuando son adultos, es decir, el hábito de tomar líquidos dulces permanece, lo cual hace más difícil que los infantes consuman agua simple como fuente principal de hidratación, de acuerdo con estudios del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).
Ante este panorama, Claudia Pimentel Hernández, investigadora del Instituto Nacional de Pediatría (INP), desarrolla una estrategia para incrementar el consumo de agua simple en niños de primaria, y así desalentar la preferencia de bebidas azucaradas, a través del programa Prefiero Agua Simple.
A decir de la investigadora, del total de las calorías que recibe un niño en edad escolar, casi 22 % proviene del consumo de bebidas.
El programa consta de cuatro sesiones educativas con carácter lúdico y una serie de actividades destinadas a la promoción de consumo de agua simple; estas sesiones tienen una duración aproximada de una hora cada una. Tiene un esquema colaborativo que involucra la participación de los alumnos, profesores y de los padres de familia.
Además, se pretende enseñar a los niños la importancia de la ingesta del líquido vital para la salud, a identificar una hidratación adecuada mediante la coloración de la orina, así como aspectos ecológicos, como el cuidado del agua, por ejemplo, e incorporará la participación de padres y maestros.
Agencia Informativa Conacyt