Despertar la mañana del 6 de enero y descubrir una bicicleta al pie del árbol navideño era uno de los momentos más felices para cualquier niña o niño, hasta hace un par de décadas (incluso era el regalo principal de la catafixia de Chabelo, pues).
Sin embargo, hoy, una tablet o un smartphone son regalos más apreciados por muchos pequeños… y también por los padres y madres que quieren tener más controlados a sus hijos e hijas mediante esos dispositivos.
Y es que siempre será más cómodo y seguro para los adultos tener a sus pequeños en el sillón de la sala entretenidos con un videojuego o viendo Netflix que acompañarlos a la calle con la finalidad de enseñarlos a andar en bicicleta, ¡y ni pensar en que salgan a andar en ella sin compañía!
Hasta hace unos años, salir en bicicleta por el barrio y alejarse un par de cuadras era una aventura para cualquiera, sin embargo, incluso hoy podría parecer una irresponsabilidad.
Actualmente, la bicicleta es considerada un vehículo citadino, un medio de transporte para hipsters, la salvación del planeta para ambientalistas, una herramienta indispensable para healthies, ¡y hasta una prestación para los godínez!, ¿entonces, por qué no puede seguir siendo un gran juguete para los niños?
Alberto Moreno, director general de Bicicletas Monk de Grupo Línea Siete, se dedica a todo lo relacionado con este vehículo desde hace muchos años, pero antes de venderlas, las bicicletas fueron parte importante en su vida. “Enseñarle a andar en bicicleta a tus hijos puede ser el tiempo más valioso que pasas con ellos, porque crea un lazo y son momentos que los pequeños nunca van a olvidar”, afirma.
Para qué sirve
Alberto dice que, en México, los consumidores de alto poder adquisitivo invierten mucho dinero en bicicletas, por lo que han generado una moda elitista; sin embargo, en las clases más bajas, todavía hay mucha gente que comprende la importancia de enseñar a niños y niñas a andar en bicicleta.
Dominar este vehículo puede representar para los niños un paso importante en su madurez, porque el brinco del carrito montable, el triciclo y las rueditas hacia poder circular en dos ruedas es un asunto vital en la formación de los individuos.
“También es una forma bonita de generar amistades reales, algo que difícilmente va a lograr un juguete digital”, anota Alberto.
César Ramos, director general de Bicicletas Mercurio y presidente de la Asociación Nacional de Fabricantes de Bicicletas, destaca que, además, aprender a andar en bicicleta es el punto máximo de la psicomotricidad, de la toma de decisiones, de los reflejos y de la capacidad de reacción, habilidades necesarias para cualquier persona, independientemente de la edad que tenga, y que representa un gran logro para cualquier niño.
“Que el niño juegue al aire libre y practique un tipo de deporte en vez de estar dentro de su casa viendo la televisión o jugando videojuegos, es un gran atributo de la bicicleta”, reitera.
La moda
De acuerdo con Alberto, México se ha beneficiado con una tendencia que ha surgido a nivel mundial con el propósito de aumentar el uso de la bicicleta: “La cultura de la bicicleta está renaciendo en nuestro país, hace 10 años empezó una moda que muchos países adoptaron en la que empezaron a verla como un medio de movilidad muy importante, y que se relacionaba con otros temas, como contaminación y salud. Esa moda tardó en llegar al país, pero ya la empezamos a adoptar”.
Este emprendedor, pionero en el comercio especializado en bicicletas en México, dice que, hasta hace un par de años, se vivió una importante caída en la producción de este vehículo, la cual provocó el cierre de varias empresas, mientras que otras se vieron obligadas a disminuir su producción por culpa de la caída de 40 % en las ventas del mercado tradicional.
La buena noticia es que, desde hace varios meses, existe un repunte, pequeño pero constante, en la venta de bicicletas para adulto e infantiles. Y los Reyes Magos y Santa Claus parece que también son parte de esta tendencia, ya que, de acuerdo con Alberto, entre septiembre y diciembre su empresa registra aproximadamente 65 % de la venta anual de rodadas 12, 16 y 20, que corresponden a edades de entre 4 y 14 años.
“Hoy, la bicicleta está volviendo a ser un artículo preciado en las casas”, asegura Alberto.
En México, la bicicleta infantil representa alrededor de 60 % del mercado nacional de este vehículo en términos de volumen, revela César. “Además, como sucede en todos los sectores de la bicicleta, los modelos para niña son los que más se venden, representando un 60 % del mercado total de bicicletas infantiles”, asegura.
La seguridad
Otro tema relacionado con la bicicleta es la seguridad, ya que temas como la delincuencia, la vialidad, la protección al ciclista y el estado de las calles han provocado una especie de “pérdida de la inocencia” de andar en bici.
Ante esto, Alberto dice que no es motivo para dejar de moverse, ya que hoy se pueden aprovechar nuevos espacios que han surgido en las ciudades, como parques, ciclovías o paseos ciclistas en los que se puede circular con seguridad en un ambiente más controlado. “Así que la seguridad no debe ser un pretexto para que se deje de usar”, menciona.
César también destaca el hecho de que hoy varias ciudades de México cuenten con vías dedicadas al uso de la bicicleta: “Es una forma de convivir en familia y, en especial, de gran utilidad para los niños, porque pueden andar un poco más seguros”, apunta.
En crecimiento
César subraya que es un buen momento para las bicicletas infantiles en México y que, al menos en las tiendas departamentales, la venta de los modelos infantiles ha mostrado un crecimiento.
“Y es que la bicicleta es un excelente regalo porque también fomenta una superación en el niño para que vaya alcanzando metas y planteándose retos”, indica.
Así que las bicicletas pueden ser un juego del día a día, además de que resulta un entretenimiento muy útil en estos tiempos en donde las personas necesitan pasar menos tiempo en espacios cerrados y vivir más al aire libre. ¡Y qué mejor que empezar desde la infancia!.