Guillermo Padrés, exgobernador de Sonora, estuvo prófugo de la justicia durante 48 días, pero el jueves pasado decidió entregarse a las autoridades “en un acto de congruencia y responsabilidad” para enfrentar los cargos de los que está acusado: defraudación fiscal equiparada y operaciones con recursos de procedencia ilícita, así como delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícia en diversas hipótesis.
Antes de ser arrestado, el exmandatario ofreció una entrevista en el noticiero de Ciro Gómez Leyva en Radio Fórmula donde dijo que los cargos que se le imputan son falsos y que la persecución en su contra es una “guerra de acusaciones” entre partidos. Mientras tanto, afuera de la radiodifusora lo esperaban elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional y de la Armada de México.
Una vez que salió, fue escoltado por los uniformados y el sonorense ingresó al Reclusorio Oriente donde compareció ante el Juzgado Décimo Segundo.
Antonio Lozano Gracia, abogado de Padrés, entregó las pruebas conducentes ante el juez de la causa y se amplió el término constitucional que será de seis días; durante ese plazo, el juez resolverá su situación.
