A mi humano le pasa a menudo que cree ver visiones. De repente voltea y ve a un gato a su lado, pero en una fracción de segundo ya no lo ve y hasta ha llegado a pensar que tenemos la facultad de teletransportarnos. Sé que no lo comenta con nadie porque tiene miedo de que le digan que le falta una tuerca.
Si yo pudiera hablar, le explicaría que no es víctima de ninguna clase de trastorno, sino de una ilusión óptica que se produce por la agilidad de movimiento que tenemos los gatos.
Debo admitir que hace unos días fui víctima de la misma sensación que siente mi humano cuando mi manada y yo le queremos hacer la maldad.
Quien me hizo sentir así fue la precandidata al gobierno del Estado de México por el Partido Acción Nacional, Josefina Vázquez Mota.
Después de su gran fracaso en las elecciones presidenciales de 2012 pensamos que no la volveríamos a ver ni en el súper, pero así como esa ilusión óptica que provocamos los gatos, de repente se apareció y ya estaba presentando su registro como precandidata del Edomex, a pesar de que es nacida en la Ciudad de México.
Es curioso, pero quiere lanzar una candidatura en un momento que muestra características similares a las de la elección de 2012: un Andrés Manuel López Obrador con altos índices de popularidad –que conste que no digo Morena, porque AMLO es el “Hombre partido”–, un Partido Revolucionario Institucional (PRI) que no quiere arriesgarse mucho ante la posibilidad de que pudiera perder los comicios, y un PAN que se sacó a un candidato de la manga.
Las encuestas ponen al PRI al PAN y a Morena en un empate técnico. La pregunta es: ¿Hasta dónde le conviene a Josefina aplicar esta táctica de aparecer y desaparecer?, porque seguramente en la campaña del Edomex va a correr lodo por todas partes.
Indudablemente a Josefina le resucitarán temas como sus pasos por la Secretaría de Desarrollo Social, por la de Educación Pública, por qué sus compañeros de partido le boicotearon la campaña presidencial y hasta aquella ocasión en la que se comentó que escondió a una de sus hijas para que no saliera en la foto familiar de una revista de muy alto rango social.
Esta vez Josefina, por más veloz que sea, no podrá aplicar la ilusión óptica. Durante cualquier debate y controversia tendrá que mostrarse bien plantada y con esa elegancia felina; ahora sí que evadir las explicaciones no será una opción porque en el Edomex se juega el todo por el todo, casi hasta la presidencia de México.
DharmaTip:
La información es poder, por eso cuando alguien crea que tiene algún “don” maravilloso, no lo saques de su error ni le ofrezcas explicaciones, sigue explotando todo lo que sabes.