Uno de los múltiples factores relacionado al incremento del cáncer de mama es que las mujeres que nunca se han embarazado tienen más probabilidad de desarrollar este padecimiento que las que tienen uno o más hijos, señaló el director del Centro de Fertilidad y Atención Materna Infantil (Cefami), Héctor Tomás Chávez.
En entrevista con Notimex, explicó que el embarazo es un estado que protege o previene contra el cáncer de mama, pues la mujer entra en un periodo de reposo para sus ovarios, no produce estrógeno y se incrementan los niveles de una hormona llamada progesterona que puede resultar defensor para el proceso de tumores malignos.
“Una mujer que tiene un bebé no regla y no tiene estímulos durante nueve meses, y si además de un año promedio de lactancia se aventó prácticamente dos años sin estímulo hormonal; si tiene tres hijos ya protegió su cuerpo durante seis años de forma natural”, refirió.
Indicó que, al contrario, las mujeres que nunca se han embarazado mes con mes sus senos se estimulan y se preparan para un embarazo que nunca va a llegar, por lo que el estímulo a lo largo de su vida se incrementa y tienden a desarrollar más riesgo de ese padecimiento.
No obstante, señaló que el hecho de que las mujeres no quieran embarazarse sólo es un factor, de muchos, en el incremento del cáncer de mama, ya que el embarazo no es un protector para todo tipo de tumores malignos, pues la población femenina en gestación tiene más riesgo de cáncer de cuello de la matriz.
Otro de los factores, detalló Tomás Chávez, es el uso de hormonas sintéticas como las que contienen en algunos métodos anticonceptivos, pues si se usan un tiempo mayor a cinco años, puede haber riesgo de desarrollar cáncer de mama.
El uso de hormonales, la mayor exposición a hormonas sintéticas aumenta el riesgo de sufrir cáncer de mama, pero sólo cuando no están bien contraindicados.
“Entonces, actualmente las personas que no quieren tener bebés se están cuidando con estos anticonceptivos hormonales, si los usan de forma indiscriminada están exponiendo su cuerpo a esto, si están bien indicados por un médico no”, advirtió.
Por otra parte, agregó, cuando una mujer ya tiene un problema de cáncer de mama y se embaraza, puede incrementar el aceleramiento del desarrollo de células malignas, ya que la gestación hace que se dispare la producción de éstas.