Pensamos que Mariana Rodríguez y Samuel García se habían saltado la barda con su boda… Desde hace unos meses, cuando la pandemia de coronavirus llegó a México y comenzó a agravarse, las autoridades de la Secretaría de Salud estuvieron diciendo no una, cientos de veces, lo importante que era evitar congregaciones de gente –tanto en la vía pública como en lugares cerrados– para evitar la propagación de COVID-19.
Aunque desde entonces muchos estamos encerraditos en casa e intentado acatar esas medidas en la mayor medida de lo posible, otras personas de plano no entendieron el mensaje y a estas alturas no sólo continúan llevando su vida de manera normal, sino que además andan celebrando fiestas que obviamente acaban con varias personas contagiadas de coronavirus y por ende, con una pandemia más larga de lo que ya es.
Justamente eso fue lo que pasó en una recientemente en el municipio de San Pedro de la Garza García, en Nuevo León, donde una boda celebrada hace unos días y de manera casi clandestina ha dado mucho de qué hablar por las tierras de la carnita asada, esto porque al parecer provocó un brote de COVID-19 y justo en los días donde las autoridades han parado el plan de reapertura del estado debido al crecimiento de casos y muertes provocadas por el virus.
De acuerdo con el diario El Norte, esta boda se realizó el pasado sábado 20 de junio. Aunque la misa se llevó a cabo en la Parroquia de Nuestra Señora Reina de los Ángeles, y en una de las imágenes mostradas por el diario se puede ver que varios de los invitados estuvieron sentados y respetando la sana distancia en las bancas de la iglesia, al final fue la fiesta la que desató todo el contagiadero.
Y es que El Norte detalla que luego de la misa, los novios e invitados a la boda se fueron a celebrar a la zona residencial Santa Bárbara, en donde asistieron cerca de 200 personas a la unión matrimonial, la cual se dio a conocer hace días a través de una edición especial de Sierra Madre, la sección de sociales del dicho diario (perteneciente a grupo Reforma) que puso una foto de los ahora esposos con el título “Contagian su amor”.
Como era de esperarse en la celebración no se respetó la sana distancia ni otras medidas preventivas del coronavirus, pues la mayoría de los asistentes anduvieron sin cubrebocas, bailando, gritando y tomándose fotos muy de cerca. Y ni hablar de los novios que en toda la boda estuvieron de que beso y abrazo como si nada.
Al menos eso es lo que nos muestran varios videos de la fiesta que han sido difundidos en Twitter, los cuales obvio les dejamos para que los chequen:
La boda se ha hecho viral y obviamente no por buenas razones
Días después de que se diera a conocer esta boda realizada en plena pandemia, el alcalde de San Pedro Garza García, Miguel Treviño de Hoyos, criticó fuertemente el enlace matrimonial celebrado en dicho municipio tachándolo como un acto egoísta por parte de los novios y los invitados a la boda, ya que con su irresponsabilidad han saboteado el trabajo que tanto el municipio como los ciudadanos han hecho para controlar la pandemia de coronavirus.
“Son actos de irresponsabilidad, por lo tanto son actos de falta de solidaridad frente a nuestra población más vulnerable: los adultos mayores. Son actos de falta de solidaridad con las personas que están trabajando en la linea de batalla: enfermeros, policías, chóferes quienes distribuyen alimentos y también falta de solidaridad de aquellos que sobreviven de su trabajo”, mencionó el alcalde en un mensaje emitido el pasado 23 de junio en su cuenta de Twitter.
Por otro lado, Javier González Alcántara, regidor independiente de dicho municipio de Nuevo León, informó a través de sus historias de Instagram que la boda se realizó sin el permiso del ayuntamiento y además, provocó un brote de coronavirus entre los invitados, por lo que pide a la gente que asistió a la boda que por favor se realice la prueba del COVID-19 y se encierren en casa hasta tener los resultados de la misma.