El Obispo de la Iglesia de Cuernavaca, Ramón Castro Castro, afirmó que la crisis generada por el coronavirus es un alto que Dios está poniendo a la humanidad, por querer jugar a ser como él, al permitir el aborto, la eutanasia y la diversidad sexual.
“Hijos, Dios no está hablando, está gritando, vamos a escuchar, sepamos escuchar, estemos atentos, la vida es tan corta, de ahí entonces que hayamos decidido medidas drásticas por el bien de todos”, abundó.
Resaltó que tan sólo en 2019 se registraron aproximadamente 50 millones de abortos en el mundo, criticando que el ser humano actúa “como si nada, a gusto, proclamando su libertad, cuando son hijos de Dios y los hemos asesinado”.
En tanto, criticó también a quienes han optado por una muerte asistida, así como el permitir que en la actualidad los niños decidan por sí mismos su sexualidad.
En su discurso, añadió que así también la corrupción, los robos, la violencia, se han hecho costumbre y ante esto se pone un alto a la humanidad.
“Con esto (COVID-19) queramos o no queramos, nos detenemos. En muchos países ya están obligados a detenerse. Con un pequeñísimo, microscópico, viene a decirle hoy a la humanidad: ey, eres frágil, eres vulnerable, ni tu éxito, ni tu dinero, ni tu poder te van ayudar, date cuenta quién eres, no juegues hacer Dios, la humanidad ha querido jugar a ser Dios”, expresó.